TOC-TOC Abril del 2012. Seleccionado junto con otros 32 para la edición del libro Eros. La fragua del trovador.
Miró la puerta del apartamento. Con el segundo timbrazo dejó de cortar cebolla. ¿Quién sería? Su marido en el trabajo, la niña en... no esperaba a nadie. De repente recordó a Jack Nicholson en esa película... Mientras se aproximaba se vio volcada sobre la encimera, apartando cebollas, mezclando brazos, piernas, muslos, carne…. Un escalofrío ascendió por sus largas piernas hasta provocar una agradable contracción a la altura de las ingles. Abrió ruborizada la puerta. El cartero le entregó la misiva, ella rubricó como destinataria el acto. Una gota de sudor brotó de su frente, recorriendo con zozobra sus mejillas, hasta caer sobre el pantalón del uniformado. Tras ello, cerró la puerta, apoyó su espalda contra el dorso y se llevó la mano al pecho. Él se fue, sin saberlo, humedecido.
¡Qué bueno! Es como una película, la puedo ver perfectamente.Me tienta este registro erótico, pero no me parece nada fácil sugerir sin pasarse.
ResponderEliminarMe encanta cómo escribes, es genial el detalle de la gota en el pantalón del cartero.
Un abrazo
La verdad es que el micro me gusta, pero a lo mejor está demasiado descafeinado. No sé, está bien sugerir, pero se puede sugerir algo más. Tendré que profundizar en eso de lo erótico, a ver que tal me sale.
EliminarIndependientemente me gusta que te guste, tú también me gustas y supongo que gustosamente te gustara.
Una perta.
Sugerente.
ResponderEliminarMucho...
Enhorabuena.
Lo leeré más veces.
Gracias CDG, me alegra que te parezca sugerente, aunque con las relecturas pierde enteros.
EliminarUna perta.
¡Qué buena erótica sugerida en un tan corto espacio!. Enhorabuena por estar ahí, entre los micros-eróticos más relevantes de la temporada. ;)
ResponderEliminar(¡He tenido una noticia de la Fragua, estoy very happy!) Ya te comentaré ... Besos, muchos besos de lunes.
Ya estás organizando una de las tuyas. Déjame adivinarlo. Te han propuesto realizar una selección de microrrelatos representativos de todos los microrrelatistas que de tan buena tinta conoces para montar con ello un libro??????????? Ves, si al final vas a terminar montando tu propia microeditorial. Habiendo ilusión lo demás viene dado. Por cierto, si no lo es, y las palabras no se auto-destruyen, no es por falta de posibilidades.
EliminarYo diría estar entre los micros elegidos por la fragua, pues para gustos, colores.
Una perta gorda.
No hay mayor erotismo que el que insinúa y nos depara la imaginación. Este relato es un ejemplo de ello.
ResponderEliminarMuy buena la narración que nos conduce como si nada por una escena evocada y un final redondo.
¡Enhorabuena por la publicación!
Un abrazo.
Muchísimas gracias Nicolás, aunque igual ha quedado algo descafeinado ¿no?.
EliminarSea como fuere, me alegra que te haya gustado, es un honor que así sea. La próxima vez que intente con mis palabras ser erotizante, buscaré una mayor cercanía a la linea roja.
Una perta.
Me gustó el micro, le diste un color diferente, atrapante y muy sugerente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Genessis, supongo que será por la presencia de Jack Nicholson que pasaba por allí.
EliminarUna perta.
Hola, Cortacuentos. Me gustó tu cuento. Felicidades.
ResponderEliminarAbrazos
Bienvenido Arte Pun, me alegra que te haya gustado, es parte del encanto de escribir, y una parte muy importante.
EliminarUna perta.
Enhorabuena. La imaginación al poder y al erotismo, jeje Aunque en este caso parece que ambos se quedaron ahí, a medias. O quizá no...
ResponderEliminarUn saludo indio
Mitakuye oyasin
Gracias David. Me alegra encontrarte por esta humilde morada. Si necesitas algo para disfrutar de la lectura házmelo saber.
EliminarY que no falte la imaginación.
Una perta.